No se puede decir que con
Diciembre, el primer disco en solitario, Leiva rompa con su pasado.
La mayoría de estas canciones fueran pensadas para un disco de Pereza, aunque luego las circunstancias fueran otras, de ahí que se pueda apreciar en ocasiones al sonido continuista de
Aviones.
Las guitarras stonianas y los instrumentos de viento toman protagonismo a lo largo del álbum, con un Leiva tocando la mayoría de los instrumentos principales (guitarras acústicas y eléctricas, bajo y batería) y rodeado de una banda de músicos de largo recorrido donde destacan Cesar Pop, Tuli, Sara Iñiguez y su hermano Juancho de Sidecars.
El disco empieza potente con
Nunca nadie y
Eme riffs de guitarras, instrumentos de viento y un estribillo fácil de colar para que el oyente no se despiste.
El álbum discurre entre el rock y el pop de canciones como
Éxtasis,
Todo lo que tu quieras (la más “
Perezosa”)
Penaltis,
92 (pop acelerado de los 70) y baladas acústicas como
Aunque sea un rato, tema destacado gracias al brillante piano de Cesar Pop y de frases como “
Las victorias nunca pasan por mi lado, las promesas y las dudas en el mismo trago”.
Hoy no me encuentro (estribillo contundente),
Vis a Vis, la canción más desnuda y sincera del álbum escrita a medias con Kike Suárez.
Telediario con unos arreglos muy conseguidos, puede que surgiera del proyecto
Autopista pues tiene una clara influencia musical a Quique González y un texto lleno de intenciones “
Paren la vida, me quiero bajar, si estoy a tiempo quiero saltar por si nos sale mal”
Más de lo mismo podemos decir de
Sudando la tristeza, esta sí acompaña la autoría Quique González, una media ranchera ideal para poner el broche final a un disco que coloca a Leiva en un merecido puesto de músicos de referencia en la actualidad.
Leiva sabe lo que quiere hacer, y como saber hacerlo y además lo hace con nota.